Con el anunciado la ley de “Seguridad Ciudadana”, el Gobierno del PP pretende criminalizar las protestas ciudadanas y atemorizar a la gente con el único objetivo de evitar nuevas protestas en contra de sus políticas de brutales recortes neoliberales. Muchas de las medidas anunciadas ya estaban contempladas en el código penal (como delitos o faltas), pero para que un ciudadano pudiera ser condenado tenía derecho a pasar por un proceso judicial donde debían demostrar ante el juez que era culpable de lo que le acusaban. Para evitar este trámite, debido a los continuos varapalos que los tribunales están dando al Gobierno, el PP quiere multar por la vía administrativa, sin juez, ni juicios ni garantías. De esta forma, no será necesario demostrar los presuntos delitos, bastará con que un policía diga que has hecho algo para que se te condene a pagar por ello.
Además, esta ley pretende eliminar las nuevas formas de protesta que se popularizaron a partir de movimiento 15M. Los escraches o las concentraciones delante de edificios de la administración pública, a partir de ahora serán consideradas como una falta muy grave. Esto supone una involución sin precedentes a las libertades civiles y políticas.
Por todas estas razones, es necesario que a partir de ahora la ciudadanía esté más unida que nunca, y no se dejan amedrentar por esta nueva ley, y continúen adelante con sus protestas y reivindicaciones sociales, porque es la única forma que tenemos de hacer frente a este Gobierno, a sus recortes y a sus leyes que están llevando al país a una situación de pérdida de derechos sociales, políticos y civiles.
Por eso Jóvenes de IUCM nos reafirmamos en el llamamiento a la lucha y a la resistencia, hasta que el miedo cambie de bando.
